Asteroide Zappa
Eduardo Basz
Puede resultar extraño. Pero hubo un tiempo en que el rock tuvo el anhelo de ser algo así como la música de cámara de la época. Y estuvo a un paso de lograrlo. Frank Zappa fue uno de los que llevaron más lejos y más arriba esa aspiración. Toda su obra esta basada en el principio-collage: la unión de elementos heterogéneos que al fusionarse sacan chispas. Junto al rythm & blues de Muddy Watters con la música contemporánea de Edgar Varese. Al morir a los 52 años, a fines de 1993, dejó más de 50 álbumes. Su itinerario artístico lo había iniciado a los 15 años cuando formó su primer grupo. Muy pronto (en 1957) pasó de la batería a la guitarra. En aquel entonces, ya componía bandas de sonido de películas clase B. Eso era antes de 1965, cuando fundó un grupo en el que venía reflexionando desde hacía tiempo. Primero fueron The Muthers, luego The Mothers, finalmente Frank Zappa & The Mothers of Invention. En 1966, grabaron el disco Freak Out que lo instaló en el mapamundi del rock y de la música del siglo XX.
¿Dónde esta, hoy día, Zappa? En el cielo, claro. Dicho esto en el sentido físico del término: el asteroide Zappafrank recorre el universo. Aunque la iniciativa de ponerle el nombre surgió en Arizona fueron los astrónomos checos quienes hicieron campaña para lograrlo. El dramaturgo y líder del movimiento de derechos humanos, Vaclev Havel recordaba que “Frank Zappa era uno de los dioses del underground checo durante los años setenta y ochenta. Era una época de completo aislamiento. Los músicos de rock locales y el publico eran perseguidos.”En aquel entonces se formó en Praga un grupo que tenía su impronta: “The Plastic People of the Universe”.
Como crítico ácido y burlón del american dream, su huella la encontramos en otros ámbitos: los Simpson, por ejemplo. Su creador, Matt Groening, hizo una de las mejor descripciones de su legado. “Bastantes veces, cuando me enfrento a un dilema en mi propio trabajo me pregunto: ¿qué haría Zappa?”.
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